Así, para mantener su pacífica vida, Mash, sin magia, se inscribe en la prestigiosa Academia de Magia de Easton, compitiendo con los hijos de algunos de los más poderosos y elitistas del reino.
Al carecer de la habilidad necesaria para sobrevivir en Easton, la magia, Mash parece estar ya en desventaja frente a sus compañeros de clase.
Para lograr sus objetivos, Mash tendrá que abrirse paso a través de cada prueba utilizando únicamente sus puños, superando la magia con los músculos, ¡todo por el ilustre título de Visionario Divino!
Al carecer de la habilidad necesaria para sobrevivir en Easton, la magia, Mash parece estar ya en desventaja frente a sus compañeros de clase.
Para lograr sus objetivos, Mash tendrá que abrirse paso a través de cada prueba utilizando únicamente sus puños, superando la magia con los músculos, ¡todo por el ilustre título de Visionario Divino!
Sin embargo, al ver su identidad expuesta y su pacífica vida amenazada, Mash comienza su viaje para convertirse en un “vidente divino”, un papel tan poderoso que la sociedad no tendrá más remedio que aceptar su existencia.